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El sábado 9 de julio, SOMOSGAY, LESVOS y la Federación LGBT Paraguaya, con el apoyo de Amnistía Internacional Paraguay, llevarán a cabo una edición más de la Parada de la Igualdad LGBT.
El escenario será la Plaza de la Libertad (Estrella entre Chile y Nuestra Señora de Asunción) desde las 13:00 hs. El lema elegido para este año “Por la igualdad, el amor y los derechos de todas las familias” conmemora el Día Internacional del Orgullo LGBT.
Para la conducción del evento se contará con la presencia de la actriz y vedette Barbara Cibils, y también estarán presentes artistas en vivo como Andrea Valobra & The Sinatras, Mothership, Lil'cake Dj, Versión Palma Loma Blues, Fabu, Skylark Western, Folklore a la Calle, y Amado Sanabria. También habrá una feria de comidas y artesanías. El acto central del evento y de la marcha con la ruta por las calles Palma, Colón y Estrella será alrededor de las 15:00 hs. Todas las personas que deseen pueden sumarse con carteles, pancartas o cualquier distintivo que gusten.
El orgullo es necesario ante el miedo. El amor es la respuesta más precisa y fructífera ante el odio y la ignorancia. La inclusión es el único antídoto a la discriminación. Hoy, más que nunca, nos mantenemos firmes hacia una sociedad que garantice derechos a todas nuestras familias y estamos convencidos irremediablemente de que la historia está de nuestro lado.
El aciago 12 de junio pasado, con lo ocurrido en Orlando, y los sucesos cotidianos de discriminación en Paraguay, el resto de la región y el mundo no nos restan fuerzas. No nos desalienta sino que, muy por el contrario, nos fortalece. Porque nos confirma que estamos en el camino correcto; porque vemos logros, luces que se van sumando, sonrisas de familias felices que nos alientan.
Estamos orgullosos de ser diversos. Estamos orgullosos de nuestras familias igualmente diversas. Estamos orgullosos de ser gays, lesbianas, bisexuales y trans. Porque siempre hemos existido y existiremos siempre. Porque somos seres humanos invalorables. Porque los modelos únicos son meros dogmas impuestos por las estructuras de poder que no se condicen con la realidad.
Así, con el orgullo y el amor en alto, tenemos más fuerza que nunca para exigir la garantía de nuestros derechos humanos.