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El 24 de mayo del 2013 se inauguró la primera clínica gratuita de salud y bienestar del hombre en el país, Kuimba’e (hombre en guaraní) que, no obstante, abre sus puertas sin distinción a todas las personas que así lo requieran.
Profesionales de blanco, consejeros, vinculadores y psicólogos brindan atención y ayuda de primer nivel a la comunidad en lo referente al cuidado de la salud y a las ITS. Tres años después de su apertura es un centro de referencia a nivel nacional, regional y global.
Cómo nació
“La idea de la clínica la veníamos gestando desde el 2008 a partir de un análisis que revelaba que el sistema público sanitario paraguayo está apuntado a lo materno-infantil. Ni siquiera está feminizado porque el sistema público atiende solamente a las mujeres embarazadas y a los recién nacidos, después el resto le abandona. Al que le tiene ausente completamente es al hombre como sujeto. El número de pruebas que se hacía, antes de Kuimba’e era de 80.000 pruebas al año de VIH de las cuales 8.000 nomás eran de hombres y 72.000 eran de mujeres y era lamentable. Entonces, la estrategia fue enfocar un espacio de salud desde la perspectiva de género. Leemos género no como vulnerabilidades sino como restricciones impuestas a los hombres en términos de autocuidado, percepción de riesgo, atención. Entonces a partir de allí se construyó el proyecto, la siguiente etapa fue conseguir un socio que apueste al proyecto y que le de libertad a Somosgay para implementarlo”, comparte el Director Ejecutivo de Somosgay, Simón Cazal.
Ese socio fue y sigue siendo AHF, Aids’ Healthcare Foundation, la organización internacional más grande del mundo que ofrece servicios en cuanto a prevención, testeo y cuidado en materia de VIH/sida, con presencia en 36 países. “AHF estaba interesado y le planteamos la brecha en el testeo, el acceso al tratamiento, principalmente de hombres gays y le planteamos la idea de una clínica como la que ellos tenían en Los Ángeles dirigida a varones latinos y dijimos que una idea así podría funcionar”, explica Cazal. El proceso duró unos 3 años. El proyecto inició tímidamente, pero con el tiempo la fundación internacional triplicó su presupuesto y extendió indefinidamente sus operaciones en Paraguay. “Eso es un logro enorme, eso garantiza una estabilidad, garantiza una proyección en el tiempo, brinda sostenibilidad al esfuerzo de la clínica”.
Referencia nacional e internacional
En la actualidad el Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social considera a la Clínica Kuimba’e como un centro de referencia para vigilar la epidemia de VIH. “Esto es sin precedente en la historia del Paraguay”, subraya Cazal.
El Gerente de Salud de la Clínica, Dr. Juan Pablo Servín, ginecólogo y especialista en ITS, indica que la experiencia de Kuimba’e es “peculiar porque hay pocas clínicas que están inmersas en un centro comunitario dirigido a donde se encuentra la población más vulnerable a las ITS. Esta es una experiencia modelo en el país y en la región”.
El Dr. Juan Pablo Servín, gerente de salud de la Clínica Kuimba'e y el Lic. David Esquivel.
Avances hacia las metas 90-90-90
“La intención de la Clínica Kuimba’e es acercarse a la meta de la Organización Mundial de la Salud, lo que se llama 90-90-90”, expresa el Gerente de Salud.
En el 2014 durante el Primer Foro Latinoamericano y del Caribe sobre el Continuo de Atención del VIH fueron adoptadas las metas 90-90-90 para el 2020 que se expresan así:
- Aumentar en un 90% la cantidad de personas que conocen su diagnóstico.
- Aumentar en un 90% la cantidad de personas con tratamiento antirretroviral.
- Aumentar en un 90% la cantidad de personas con carga viral indetectable.
El impacto de la clínica a nivel social es explicado por el consejero Carlos Sánchez:
“El impacto es positivo, en el sentido de que sensibiliza y empodera, primero a usuarios (hombres gays, bisexuales y HSH asi como heterosexuales) acerca de la salud entendiendolo como un derecho humano universal, que históricamente en términos políticos les fue negado. Asimismo en un segundo nivel sensibiliza a las mujeres (entre ellas mujeres trabajadoras sexuales y trans, poblaciones clave en términos de VIH asi como los gays), lo mismo pasa con adolescentes y jóvenes,transversalmente.” Los efectos no se limitan a cuestiones médicas, sino que la Clínica, inmersa en un Centro Comunitario, también realiza una labor en materia de derechos humanos.
Hasta el mes de abril de 2016 las cifras son las siguientes:
- 3.272 (75%) hombres que han acudido a la clínica
- 1.103 (25%) mujeres que han acudido a la clínica
- 8 consultas por día
- 45 personas por semana
- el 30% de estas personas son de 1º vez.
El Dr. Ever Ortiz y la Lic. Johanna Pereira.
Atención gratuita y universal
La clínica atiende en turnos mañana, tarde y noche. De 09 a 19 horas. En cada turno hay un doctor y un enfermero. También atiende una psicóloga de 16 a 19 horas los días martes y miércoles. Todos los servicios son sin costo, la persona simplemente debe acudir a Independencia Nacional 1032 casi Manduvirá o llamar al 495 802.
La clínica también ofrece testeos rápidos y gratuitos y la asistencia y contención de parte de consejeros y vinculadores quienes se encargan de brindar atención personalizada a la persona que lo necesite. Además, hay preservativos, materiales informativos y un sitio de esparcimiento donde compartir con amigos.
En Ciudad del Este, Somosgay también cuenta con un centro de testeo y próximamente también brindará atención médica. En Villeta se inaugurará próximamente otro centro que brindará los mismos servicios.
Si bien la clínica funciona con los profesionales de la salud más competentes y con el reconocimiento del Ministerio de Salud y la fundación mundial más importante en materia de respuesta al VIH/sida, es un sitio agradable que dista de parecer un sanatorio. Es ante todo un centro comunitario y su ambiente cálido, amigable y libre de juzgamientos contribuyen al ejercicio pleno de los derechos humanos, sin estigmas ni discriminación.