Noticias

Es muy posible encontrarnos con algunas sorpresas abajo:

Mito: Soy monógamo, entonces no estoy en peligro.

FALSO: Algunas investigaciones sugieren que son más los hombres gay que adquieren el VIH de sus parejas regulares que de una relación de una sola noche.

Mito: Solamente usando condón podés protegerte del VIH.

FALSO: Esto era cierto hasta hace muy poco. Ahora podés conseguir la alternativa: PrEP, que significa “profilaxis pre-exposición” o un tratamiento antes de exponerse al virus que mata al virus antes de que pueda esparcirse en el cuerpo. La PrEP es muy efectiva pero no te protege contra otras infecciones por lo que el condón continúa siendo la opción más accesible y mejor.

Mito: Al pagar la PrEP, la salud pública quitará dinero de otros pacientes.

FALSO: Es una mentira. Si la salud pública da la PrEP no solo te protege a vos sino a las otras personas con las que tienes relaciones. La PrEP ahorrará dinero al sistema de salud.

Mito: Hay una “pastilla del día después” para el VIH.

FALSO: No es una simple pastilla. Es otra opción llamada “Profilaxis post exposición” o PEP. Es un régimen que se inicia inmediatamente después de tener una relación sexual riesgosa, pero no es tan simple como la “pastilla del día después”. La PEP debe comenzar inmediatamente después de haber tenido sexo, después de 72 horas es muy tarde. Luego, requiere un tratamiento de un mes.

Mito: El bareback (sexo sin condón) es más excitante.

FALSO: Esta es una decisión personal. Preguntate qué te importa más: con quién estás, qué estás haciendo o el hecho de que uses condón.

Mito: Las lesbianas no pueden transmitirse el VIH.

FALSO: Las mujeres pueden transmitirse el virus entre ellas aunque el riesgo sea muy bajo. Entre los factores de riesgo se encuentran la exposición a fluidos vaginales u otros, sangre menstrual o sangre durante el sexo.

Mito: Mientras sea activo, está todo bien.

FALSO: Si bien los pasivos tienen siete veces más probabilidades de adquirir el virus que los activos en el sexo gay sin protección, cualquier sexo anal sin protección conlleva un riesgo de transmisión de VIH. Ser solamente activo no es sinónimo de sexo seguro.

Mito: Tener sexo bareback (sin condón) con un chico seropositivo es lo más peligroso que puedas hacer.

FALSO: Por supuesto debes usar protección con una persona que viva con el virus. Si alguien que vive con VIH no conoce su carga viral y no se encuentra adherido, existe un alto riesgo de que transmita el virus. No obstante, si la persona se encuentra bajo tratamiento, su carga viral será 'indetectable' lo que significa que el virus no podrá ser detectado por los tests. En ese nivel es muy poco probable de que puedan transmitir el virus.

Mito: Si no me hago el test, solamente me hago daño a mí mismo.

FALSO: Tenés altas probabilidades de transmitir el VIH si tenés el virus pero aún no lo sabés. El test es muy importante, mientras más temprano comiences con el tratamiento, mejor será tu salud a largo plazo. Podés iniciar tratamiento inmediatamente al ser diagnosticado. El tratamiento es proveído sin costo de bolsillo en Paraguay. 

Mito: El líquido pre-seminal no posee riesgo.

FALSO: Hay una pequeña cantidad de VIH en el líquido pre-seminal aunque menos que en el semen. Es muy difícil transmitir VIH en el sexo oral pero sí puede transmitirse en el sexo anal y vaginal.

Mito: Más hombres heterosexuales que gays contraen VIH, ellos tienen más riesgo.

FALSO: A nivel global, más hombres heterosexuales contraen VIH cada año. Pero hay menos gays que heterosexuales y una gran proporción de nuestra comunidad ya vive con VIH, por lo que los hombres gay y bi son un grupo altamente expuesto al virus.

Mito: Podés adquirir el virus de cualquier sangre que encuentres en la calle.

FALSO: El VIH es un virus extremadamente frágil y solamente dura unos cuantos segundos fuera del cuerpo. Pero hay que tener en cuenta que al intercambiar jeringas, el virus puede transmitirse muy rápidamente y eso sí supone un alto riesgo.

Mito: Si tenés VIH, vas a tener sida.

FALSO: Cuando hay un diagnóstico temprano y comenzás a tomar tu medicación, es muy poco probable que desarrolles sida. Inclusive si llegas a esa etapa, podés obtener tratamiento y volver a solamente vivir con VIH. Las personas que viven con el virus y se encuentran con tratamiento hoy disfrutan de una expectativa de vida normal.

Mito: Los personas que viven con VIH no pueden tener hijos de manera segura.

FALSO: Si vivís con VIH y querés tener un hijo, consulta a tu médico. La ciencia ha encontrado maneras en que una persona pueda dar a luz a un hijo sin virus.

Mito: Tuve sexo sin protección con un chico y no tengo el virus, no creo que me infecte.

FALSO: Podés contraer VIH la primera vez que tengas sexo sin protección o la 100° vez. Nunca sabés.

Mito: Creo que soy inmune.

FALSO: La inmunidad es extremadamente rara. Por ejemplo, un caucásico en un mil podría ser inmune, o inclusive mucho menos.

Mito: VIH y sida son lo mismo.

FALSO: VIH es virus de inmuno deficiencia humana. Podés vivir con VIH y no darte cuenta. Si no te tratás, el virus causa sida, síndrome de inmunodeficiencia adquirida. Aquí es cuando tu sistema inmunológico se destruye y permite a otras infecciones y enfermedades destruirte.

Mito: Él se ve saludable, no puede ser que tenga el virus.

FALSO: El virus no te hace ver diferente. Al ser asintomática, la infección por VIH no es visible. La única manera de estar seguro es haciéndose una prueba. 

Mito: No existe desventaja alguna en vivir con VIH.

FALSO: Tristemente no es así. Aunque el tratamiento es altamente efectivo, aún seguimos enfrentando mucho estigma y discriminación al respecto. Una forma de combatirlos es dando información, podés ayudar compartiendo esta nota :)

Mito: Los científicos habrán curado el VIH en el momento en que me afecte.

FALSO: Ojalá. Pero nunca se sabe.

¿Cuáles mitos te sorprendieron más? Si querés saber más, podés descargar la app “Equis” disponible en Google Play.